EL OTRO DÍA ......

El otro día, en un viaje a Sevilla me paré a tomar un café (bueno un descafeinado de maquina con leche), y parecía cosas del destino, me toca un azucarillo de esos que te marcan y que no quieres utilizar por el mensaje escrito que llevaba, definía una forma de ser padre, definía a su forma y manera, pero a mí me gustó, lo definía de la siguiente forma: “el tener un hijo no te hace padre de igual forma que tener un piano no te hace pianista” (Michael Levine), ¡cuanta razón tiene!. ¿Que es ser padre?, creo que es dar todo el amor y sabiduría que tienes, recibiendo de parte de tu hijo una milésima parte de lo que tu ofreces, eso sí, sin importarte. El ser padre debe de ser crecer como persona, dejar un poco de tu impronta en un ser vivo, que mañana tendrá su vida propia y que será parte de la persona que tu fuiste, o por lo menos te recordará como una persona que le ofreciste tu amor, cariño y protección incondicional.


Perdona hijo, que te hable de esta forma, pero creo que al igual que tu serás nuestro hijo, nosotros aprenderemos a ser tus padres, ¡y que miedo me da!. Me da miedo que te hagan daño, que no seas aceptado, que no seas querido, que te rechacen por tu color, condición, raza, sexo, por sus prejuicios, envidias, celos, etc. Me da miedo no estar a la altura que te mereces, de no saber defenderte y hacer que te defiendas. Me da miedo, que el amor me ciegue y que te proteja en demasía, y por tanto te haga débil. Yo quiero que seas fuerte, sin perder la afectividad, el cariño, la ternura. Te tengo que enseñar a ser feliz, a luchar, a realizar y trabajar por tus sueños. Tengo que hacer que te desarrolles como un individuo libre, profundo, cariñoso, afectivo, fiel a tus creencia y principios, bondadoso, luchador, trabajador, integro, y como no, AUTENTICO.


Te tengo que dejar, que un gran amigo “Manolillo” ha llegado, y tu mamá también ha llegado, en otro momento sigo contándote mis pensamientos. Un beso, hijo mío duerme y ten paciencia que mañana te sigo contando.

Que ganas tengo de que me escuches y yo de hablarte…..

4 comentarios:

abu dijo...

Como rio que, curso abajo en discurrir sereno y lento, ignora y no le preocupa su nacimiento...
Ese ser ya nacido que. cuando tome conciencia de serlo, tenga un hogar y vuestros brazos para sostenerlo...

abu dijo...

Hablas de Sevilla, de un descafeinado, de un azucarillo... y lo relacionas con "destino", !claro hombre!; es igual, podia haber sido cualquier otra cosa. Porque en definitiva está en tí lo que imprezna, como esa fila de hormigas que al caminar dejan su huella ya sea tierra ya roca... no te engañes Alex, porque siempre encontrarás un pretexto, aunque no te pares a tomarte un descafeinado.

Manolo dijo...

De saber lo que estabas escribiendo, me habría retrasado un poco, estabas hablando con tu hijo y te interrumpí. Te propongo que en un futuro, cuando hables con tu hijo y yo aparezca por casa, en lugar de dejar de hablar con el, hablaremos los dos y así yo le contaré cosas de sus padres (ya sabes que casi todas buenas), ¿que me dices?

nacho dijo...

El destino es complejo pero caprichoso.Supo hacerlo difícil pero os ha sabido encaminar, a encontrar en otro lugar, muy lejano y distinto a alguien que le hacíais mucha falta. No quiso que fuesen otros padres los que estuviesen con vuestro hijo, sino que fuéseis vosotros quienes fueseis a buscarlo.Fue difícil entender qué quería el destino de vosotros, sobre todo cuando es algo que te induce pero no habla, simplemente te va guiando y sin hablar, tienes que aprender a escucharlo.No te preocupes de lo que ya sabes hacer y que se debería escribir en mayúsculas para vuestra aventura, no añores lo que demuestras cada día, vívelo aunque todavía no puedas abrazarlo porque en cada renglón que escribes, lo haces.

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